¿Qué esperar de una comunicación?
Buenos resultados
Las
sesiones
son
muy
útiles
para
temas
específicos
relacionados
con
la
vida
diaria
de
tu
animal,
como
saber
si
le
gusta
lo
que
come,
si
disfruta
las
caminatas,
si
congenia
con
quien
le
cuida
si
tú
no
estás,
o
si
está
conforme
con
los
arreglos que haces cuando sales de viaje, por ejemplo.
También
obtenemos
buenos
resultados
a
largo
plazo
cuando
se
trata
de
temas
más
complejos
de
carácter
emocional.
Varias
sesiones
siempre
respaldadas
por
el
trabajo
en
casa
son
la
fórmula
que
propicia
avances
en
este
tipo
de
situaciones.
Es
común
que
las
comunicaciones
sean
un
excelente
apoyo
en
momentos
que
implican
cambios
en
la
vida
de
la
familia
del
animal
que
pueden
alterar
su
carácter
normal,
como
separación
temporal
o
permanente
de
otros
compañeros
humanos
o
animales,
cambios
de
ciudad
o
incorporación
de
nuevos miembros.
Igualmente,
con
esta
herramienta
se
puede
tener
un
valioso
apoyo
cuando
nuestros
compañeros
van
a
morir
o
ya
han
trascendido,
porque
contribuyen
al
cierre
que
puede
hacer
más llevadero el duelo.
Qué no esperar
No
debes
esperar
que
la
comunicación
cambie
comportamientos
en
tu
compañero
animal:
recuerda
que
es
un
ser
con
voluntad
propia
y
que
está
influenciado
por
variables
como
sus
condiciones
genéticas,
su
entrenamiento,
la
relación
con
sus
humanos,
sus
experiencias
de
vida,
etc.
Contempla
esta
comunicación
es
como
la
que
podrías
tener
con
otro
humano
al
que
le
pides
que
cambie:
si
no
encuentra
razones
suficientes
para
hacerlo,
no
cambiará.
Y,
de
manera
frecuente,
considera
que
los
cambios
en
las
conductas
de
tus
animales
siempre
requerirán
modificaciones
en tu forma de relacionarte con ellos.
La
comunicación
nunca
suple
un
diagnóstico
veterinario,
ni
el
trabajo
de
un
entrenador.
Personalmente
no
la
utilizo
para
comunicarme
con
animales
extraviados,
ni
hablo
con
animales
sin
la
previa
autorización
de
su
humano
“tutor”.
(No
me
parece
ético
hablar
con
ellos
cuando
propietario
o
el
encargado del refugio que lo dieron en adopción lo solicitan).
Es
importante
resaltar
que
una
comunicación
no
tendrá
un
buen
resultado
si
no
cuento
con
la
información
pertinente
y
relevante
para
dialogar
con
tu
compañero
animal.
Lo
mismo
sucederá
si
no
se
le
brinda
igualdad
en
la
conversación:
algunas
veces
los
temas
que
el
humano
sugiere
no
son
los
más
importantes
para
el
animal
y
podría
decidir
no
hablar
de
ellos.
•
Conoce
su
sentir
respecto
a
temas de la vida diaria.
•
Habla de su estado físico.
•
Haz
acuerdos
sobre
tus
próximas vacaciones.
•
Conoce
sus
estados
de
ánimo y trabajenlos juntos.
•
Ayúdal@ en momentos de cambio.
•
Despídete al final de su vida.
•
Cambios
de
c
o
m
p
o
r
t
a
m
i
e
n
t
o
instantáneos.
•
Sustituir
diagnósticos
veterinarios.
•
Reemplazar
a
un
entrenador.